MIKAËL
Octubre 2017
Soy Mikaël,
Príncipe y Regente de las Milicias Celestiales. Bien amados hijos de la Ley del
Uno, acojámonos los unos a los otros dentro de la Eternidad y el Amor.
…Silencio…
Saludo y
honro a cada uno de vosotros en su verdad eterna de Luz. Bendito sea el Eterno.
…Silencio…
Hace algunos
meses, en términos terrestres, os anuncié el arado de la superficie de la
Tierra. Hoy, eso es visible a través
de la actividad de los Elementos. Ya sea por el Fuego, ya sea por el Agua, por
el Aire o por la Tierra, el Fuego Ígneo se revela a vosotros en cualquier lugar
al que dirijáis vuestra mirada. La evidencia de esto, ya no podrá ser ignorada.
El Arcángel Uriel actúa
ahora en vosotros para revelar el Blanco de la perfección, de la belleza y de
la Verdad.
Como María os ha dicho, no
os dejéis engañar por ciertos aspectos impresionantes de mi Presencia -mi
Presencia, por supuesto, que está también dentro de vosotros en el Fuego
ardiente de vuestro Corazón, en la intensidad del Amor. Eso se vive ahora, de
forma directa, concreta y palpable.
Es en vosotros, no en el
escenario de este mundo ni en la escena de este personaje, donde se encuentra
la única Verdad, accesible por mi arado y acción sobre los elementos; esto permitirá
al Ángel Uriel, Ángel de la Presencia, y Arcángel de la Reversión, haceros
vivir y ver la Verdad. No necesitáis ningún equipaje, ningún requisito; eso
forma parte del don de la Gracia que la Tierra vive en este mismo momento.
No os desviéis de la Verdad,
por ningún elemento de vuestro cuerpo o de vuestra vida, o de este mundo;
manteneos firmes en la Verdad y todo lo demás os aparecerá con evidencia, no la
evidencia de los acontecimientos, sino la de vuestro Corazón. Ha llegado el
momento de vivir todo lo que hemos preparado juntos para la celebración final,
para las Bodas finales.
Olvidad todo pasado, toda
experiencia y permaneced en la desnudez de vuestro Corazón que solo es la
Verdad y la belleza inefable, a nada parecido. El Ángel Uriel irradiará todo lo
que es falso, todo lo pasajero para que no quede más que la Blancura
inmaculada, la inmaculada Alegría.
A partir de
ahora -y las circunstancias de vuestras vidas os llevarán también a ello-, solo
existe lo esencial: vuestro corazón. Cada circunstancia de este mundo, cada
circunstancia de vuestra vida en el personaje y en la historia, os conducirá con
fuerza o con suavidad al mismo lugar, a la misma verdad común a todos, allí
donde no hay ninguna diferencia, allí donde está la Libertad y allí donde está
la Alegría. Como María os ha dicho, únicamente depende de vosotros y solo de
vuestra conciencia, que lo viváis y lo reveléis con facilidad y majestad.
Mi arado y
mi siembra continuarán de manera más y más intensa, a medida que Nibiru avanza,
cuyos efectos son ya perceptibles antes de su visibilidad. Como sabéis, toda la
Confederación Intergaláctica de los Mundos Libres, los Arcángeles, los
Ancianos, las Estrellas, los pueblos galácticos, están tan preparados como
vosotros para vivir esto. Todo lo demás desaparecerá de vuestra vista, la
Verdad estará desnuda y todo se regenerará; nada será igual en vuestra densa
realidad.
Cualesquiera
que sean las sirenas exteriores, sean cuales sean las resistencias y los
vínculos o la ignorancia existente en muchos de vosotros, no os alarméis, todo
sucederá a la perfección. La majestad de la Luz, así como su despliegue
visible, no permitirá el más mínimo error, la más mínima anomalía ni la más
mínima desviación. La Verdad está desnuda, el corazón se reencuentra. Recordad
que no hay nada más que hacer, nada que emprender, solo estar ahí, estar
íntegramente ahí. Todo lo demás lo hará la Gracia, la misma Luz, en su
Inteligencia y en su Presencia. Ya nada va a depender de vosotros, si no es
para volveros hacia vosotros mismos, no para huir de cualquier acontecimiento,
de cualquier elemento de vuestro cuerpo o de vuestra vida, sino para establecer
la Verdad de manera visible.
María os ha
dicho que no hay ninguna circunstancia previa, ningún estado anterior que
constituya un obstáculo para la Verdad del corazón; eso se produce ahora mismo
y se reforzará cada día un poco más, hasta el momento de la Llamada y de la
Revelación en vuestros cielos.
Vivid
simplemente lo que la Vida os propone, tanto en las penas como en las alegrías
porque sean cuales sean las penas y las alegrías efímeras, son pasajeras, solo
permanece el Amor, solo queda la Verdad.
La llamada
del Espíritu, la llamada del Fuego Ígneo os toca cada vez más físicamente a
través de diversas manifestaciones. Dejaré para eso, al Arcángel Anaël que os
dará algunos detalles, algunos elementos que os servirán tal vez para
tranquilizaros y animaros.
A medida que
trabajo en la superficie de la Tierra, corto en vosotros, por vuestra aceptación,
lo que debe ser cortado, eliminado, para dejaros vivir la Verdad libremente, en
la alegría inigualable del Amor.
Os aparecerá
de manera obvia, si no está ya hecho, que solo la interioridad del corazón y el
silencio, permiten el florecimiento de la Luz, en vuestra Presencia, ayudándoos
a la desaparición de vuestro personaje de diferentes maneras específicas en
cada uno, antes de la Llamada de María.
Nadie sabe
la fecha ni la hora, ni siquiera ahora, en el calendario terrestre, pero solo
puedo confirmaros que es ahora. Sea cual sea el desarrollo, sean cuales sean
las etapas y lo que se ve, la Verdad está ahí. Sean cuales sean las
gesticulaciones relacionadas con el miedo, la evidencia prevalece sobre la
confusión.
Todo sucede
en la verdad de vuestro corazón. Todo lo que podáis observar fuera -y ese
exterior es todo menos el corazón, ya se trate del exterior de vuestro cuerpo,
de vuestro entorno, de la escena del mundo-, son solo las agitaciones estériles
de los que todavía no se han reencontrado. Perdonadlos, porque ellos no saben
todavía lo que son.
Todos los
juegos terminan con la misma potencia, destruyendo las ventajas que todavía
podían encerrar a vuestro corazón, limitarlo y forzarlo. María os ha dicho que
solo tenéis que mirar hacia vuestro corazón para que la conciencia lo siga y
vuestro personaje esté en silencio.
La Luz es
simple, la persona será cada vez más compleja, también la vida ilusoria, pero
la Vida real tomará cada vez más poder. Tanto si lo sabéis o no, como si lo
vivís o no, eso no cambiará nada.
Todo está
listo, todo se ha cumplido, todo se materializa para desaparecer en el Fuego
del Amor. El Espíritu está por todas partes, la Verdad irrumpe en todas partes.
Casi no hay zonas desprovistas de Luz y claridad.
Son solo los últimos sobresaltos de la agonía de la Ilusión que no tiene nada
que ver con lo que sois, independientemente de vuestra persona y de vuestra
historia.
La Luz os quiere siempre más
disponibles para la Verdad y no para los juegos ni para el sufrimiento. La Luz
que sois, ya no puede estar obstaculizada o limitada en ningún sentido o por
ningún acto de la locura humana. Ellos no saben lo que están haciendo.
Así que alegrémonos, estéis
donde estéis porque todo cambia, todo se transforma para dejar solo a la Verdad.
No os preocupéis de nada, solo de ser vosotros mismos, solo de encontraros. La
facilidad será entonces vuestro lote diario, la Evidencia será una Gracia
enriquecida; se puede decir así.
La Luz ilumina vuestro
corazón. Iluminaréis el interior poniendo fin a las luces de neón del mundo, a
las imágenes engañosas, a esos sustitutos de la vida. No puede haber ninguna vacilación, ninguna
duda, desde el instante en que vuestra conciencia se vuelve realmente hacia la
Eternidad. No tenéis nada que comprender, nada que tomar, nada que justificar
ni siquiera explicar.
Solo tenéis que reconoceros
a vosotros mismos y eso no puede pasar, en ningún caso, por vuestra cabeza, eso
no puede pasar bajo ninguna circunstancia por la linealidad de vuestra
historia, independientemente de lo que hayáis experimentado algunos, durante
muchos años. Sed nuevos, vírgenes de toda suposición. Así tiene lugar la
verdadera aceptación. Poned fin a toda condición, a todo requisito, a toda
suposición y os estableceréis instantáneamente en la Verdad eterna, en el
Blanco de la Verdad.
Me dirijo a todos los hijos
de la ley del Uno, al corazón de cada uno para deciros: “regocijaos”, no
sucumbáis ante ningún sufrimiento, no sucumbáis ante ninguna ilusión o desvío.
Estad ahí; eso es suficiente. No hay ninguna otra condición ni requisito, no
hay ninguna otra preparación. La Paz solo os pide acompañaros en vuestros
últimos pasos en este mundo. La Verdad y el Amor son vuestras guías infalibles
en el regreso que vivís.
Vivid cada minuto y cada
paso que deis en este mundo, con intensidad. Cada minuto es el último, cada
paso es el último. No quedará más que la Verdad, sean cuales sean los
acontecimientos por los que hayáis pasado o vayáis a pasar. Entonces, la
intensidad de la Vida libre os recorrerá no solamente a través de las
vibraciones, no solamente a través de las percepciones del cuerpo de Êtreté, aquellos
que lo vivís, sino de manera mucho más directa, en el corazón.
Y la misma
posibilidad es para todos, dondequiera que estén. Tienen la misma facilidad, la
misma evidencia, diga lo que diga su persona o su situación.
…Silencio…
Lo que os
digo aquí, aunque parezca insensato, improbable o una locura a vuestra razón,
solo es por un engaño de los últimos condicionamientos de vuestra persona. No
hay obstáculo y habrá cada vez menos, para los que creen todavía que los
tienen. Estos no son más que trampas.
No hay
demora, no hay distancia y esto es ahora.
Solo debéis recordar
una cosa de todo lo que habéis escuchado, seguido o vivido y es: alegraos, el
corazón está presente, habéis encontrado el corazón.
…Silencio…
Mis palabras
son menos numerosas porque están acompañadas por la espada de la Verdad y el
Espíritu del Sol. Mis silencios son más intensos que mis palabras.
La
“Endo-Teofanía” se realizará ella misma de manera imprevista, en muchos de
vosotros, durante los días que se abren ante vosotros.
Para
aquellos que desesperan de no vivir el corazón, no hay error, no hay demora, no
hay anomalía; simplemente dejad que se haga lo que se tiene que hacer. No
luchéis, no os agarréis a nada. No tenéis que entender ni incluso explicároslo,
porque el corazón es natural, es eterno y vosotros sois Amor, diga lo que diga vuestra
vida, penséis lo que penséis. Y esto es simple, y esto se volverá así, si no lo
es todavía, muy rápidamente, de manera fulminante; en un instante, muchos de
vosotros resucitaréis a la Verdad.
Finalmente,
algunos veréis a la Inteligencia de la Vida purificaros, esculpiros en la
Eternidad. Confiad, la Verdad está ahí para todos e incluso para los que la
ignoran todavía. Simplemente debéis estar en la “Aceptación”, sin proyectar
nada ni buscar nada en el exterior de vosotros. Todo ocurre en vosotros y en
ninguna otra parte, porque la pantalla del mundo es pasajera y pasa cada vez
más rápidamente, sin dejar subsistir ninguna estructura ilusoria.
No hay nada
que preparar, estáis todos totalmente preparados, aunque digáis lo contrario,
aunque se os escape de momento. Tened confianza en el Amor, tened confianza en
la Verdad eterna que sois, aunque no percibáis nada. Lo que os estoy diciendo no
es un estímulo sino simplemente la Verdad establecida que crece con estrépito
todos los días.
No puede
haber amenazas, no puede haber juicio, no puede haber pérdidas en lo que
sucede. Y aunque tengáis que perder vuestro cuerpo, ¿qué diferencia hay desde
el momento en que estáis aquí presentes en el cuerpo de Eternidad? Porque lo
que aparece, nunca desaparecerá; como sabéis, lo viviréis.
…Silencio…
Todos vosotros estáis listos
incluso y, sobre todo, los que dicen que no lo están. Id
más allá de las apariencias, más allá de lo que pueda pareceros una paradoja,
pero que no lo es. Verificadlo, vedlo por vosotros mismos.
…Silencio…
Os bendigo y
os honro a todos vosotros en cualquier lugar que creáis estar fuera del
corazón. Conozco todos vuestros corazones que son el Corazón Uno.
No se
necesitan más palabras ni más claridad porque me dirijo a vuestro corazón y él
lo sabe.
Soy Mikaël,
Príncipe y Regente de las Milicias Celestiales. En la Paz de Cristo, en el Amor
de María, os honro. Y me uno, en este instante, a vuestra humanidad. Aunque no
conozca la forma, vuestra transparencia actual me hace ver vuestro corazón.
Seáis conscientes de ello o no, es la verdad.
Id en paz,
id en alegría y anunciad la buena nueva -dentro de vosotros. Y dejad a cada uno
en su libertad de elección. No abruméis a nadie, no enojéis a nadie, sed
dulces, humildes y fuertes en el Amor. Os saludo. Siempre en la Eternidad.
Siempre en el Amor.
…Silencio…
Adiós.
***